Por: Loreto Gatica Fecha:2 Feb 2025

El Sauce Lo Abarca: el restaurante de 101 años de historia al que fue Nicanor Parra

A poco más de una hora de Santiago, encuentras esta picada histórica, conocida por su chancho a la chilena, como el costillar, dorado y jugoso por dentro, hecho a la vieja usanza, en tres días de cuidadosa preparación.

El Sauce está en Lo Abarca, hacia el interior de Cartagena, es decir, a cerca de 75 minutos de Santiago, por la Ruta 68; o al rededor de 80 minutos si prefieres la Autopista del Sol.

Sabina Vilches, junto a su hermana Viviana es la guardiana de la tradición de este local familiar Foto: Carolina Vargas

Se trata de un restaurante con estacionamiento y distintos salones, incluso uno apto para mascotas, donde se guarda toda la tradición del chancho a la chilena.

Es más, la historia parte en 1923, como deposito de licores y Quinta de Recreo, a cargo de Angelino Menares y Rupertina Pérez, bisabuelos de Sabina Vilches, quien junto a su hermana Viviana, se encargan de mantener la herencia intacta.

Historia construida, en base a aliños y recetas, que se guardan bajo siete llaves, mística que han hecho de El Sauce de Lo Abarca, un lugar querido, puro patrimonio, reconocido por chefs, incluso al que solía ir Nicanor Parra.

De hecho, la experiencia en este lugar, comienza con pancito amasado, hecho por una vecina, la misma que los fines de semana hace empanadas. “Las papas las compramos a un vecino, al igual que las lechugas, los tomates, todo es cultivado por vecinos. La idea es generar una economía circular”, cuenta Sabina Vilches.

La Vaina, un imperdible en El Sauce de Lo Abarca Foto: Carolina Vargas

El Sauce Lo Abarca: oda al chancho a la chilena

El Costillar es el plato más pedido de la carta Foto: Carolina Vargas

Y, de la carta, el Costillar es el rey ($ 17.900, con acompañamiento). Del cual puedes elegir entre tres cortes: el doble, con hueso y cubierto por una capa de carne; sólo con hueso; o deshuesado, de pura carne.

Además, mantienen todo el sabor de la receta de la familia. “El toque está en el aliño, mantenemos la receta de mi bisabuelo. Usamos carne fresca y la preparación toma tres días. El primero se desgrasa y se deja en sal. El segundo se deja adobando y al tercer día la preparamos”, cuenta Sabina.

De hecho, si bien viene con agregado, como papas fritas por ejemplo, puedes pedir extras, como la ensalada surtida de la estación ($ 4.490); o la Tomate palta ($ 4.490).

Otra opción es que pruebes el Arrollado ($ 17.990), también hecho en el lugar; o el Lomo liso ($ 18.990), que, como todos los platos, viene con agregado. Ojo con el puré ($ 4.490), totalmente casero, rústico, molido a mano, tradicional o picante.

Además de una muy surtida carta de vinos, que abarca toda la zona y más. Opciones costeras, blancos, rosados, y tintos de clima frío, como Cartagena ($ 14.990), el Sauvignon Blanc, de Casa Marin, que queda muy cerca del lugar; o Vaguada ($ 14.990), Syrah Ligero de Tintomare.

Es más, atento a su Instagram, en el que se anuncian actividades como Atardecer de Vinos, que es una barra que se instala en el lugar, cosa de poder probar y conocer más de su cava, y para el cual sólo se cobra el consumo.

Aunque si hablamos de imperdibles, parte por la Vaina ($ 4.990), clásica, con ese toque de vino dulce y cacao, que aquí es ligeramente ácida. Incluso acompaña bien postres como la Torta de merengue ($ 4.790), totalmente casera, que puede ser de lúcuma o frambuesa.

También la Leche asada ($ 4.790); o los duraznos en almíbar ($ 3.990).