Esta receta de lomo saltado,ese clásico de la cocina peruana que es una tentación de carne jugosa con arroz y papas fritas, es una de las  600 que encuentras en ¡Bravazo!, el libro en el que Gastón Acurio, el chef más famoso de Perú le rinde honores a la cocina casera.

Una publicación que fue un hit de ventas en su país y que puedes comprar en diferentes formatos a través de esta web.

Aquí te damos todos los detalles para que puedas hacer esta receta de Lomo saltado en casa.

Ingredientes

• 2 cebollas rojas cortada en tiras gruesas
• 4 tomates chicos cortado en tiras gruesas sin pelar
• 1 ají amarillo cortado en tiras delgadas
• 4 tallos de cebolla china o cebollín (separando la parte blanca del tallo verde: la parte blanca la picamos en rodajitas; la parte verde, en pedazos grandes)
• 4 dientes de ajo que primero hemos chancado y luego cortado finamente.
• Lomo de res cortado en tiras gruesas, más o menos del tamaño de tu dedo gordo
• Hojas de 8 tallos de cilantro
• 8 cucharadas de vinagre tonto o blanco, mezcladas con una cucharada de salsa de ostión (este último es opcional.

Preparación

1. Antes de empezar, nos aseguramos de que ya nuestro arroz blanco listo para acompañar y que todas nuestras papas ya están fritas y crocantitas.
2. Pero, sobre todo, nos aseguramos de que todos los comensales ya están en la mesa o listos para comer. El lomo saltado no puede esperar al comensal, el comensal debe esperar al lomo saltado. No le vaya a ocurrir lo que ocurría en la casa de mi infancia, en donde el lomo saltado nos esperaba en el horno ya servido en cuatro platos, tres horas después de haber sido preparados.
3. Una vez que todo está asegurado, echamos aceite vegetal en un sartén grande y delgado en el fondo. Subimos el fuego al máximo y, cuando se empiece a botar un primer humo, solo el primero (no podemos dejar que se queme el aceite), entonces echamos la mitad de la carne previamente sazonada con sal y pimienta. Rápidamente hacemos un movimiento brusco mientras chisporrea todo, y echamos una pizca de vinagre. Si tiene suerte, unas gotas salpicarán el fuego y una llama se encenderá haciéndole creer que está flambeando la carne. Si no pasa, no importa. Saldrá rico igual. Lo importante es que esto dure solo un minuto como máximo y que no permita que el sonido del fuego “chispoteando” baje, porque será señal de que no está saltando, sino hirviendo.
4. Empezamos de nuevo. Aceite, calentar al máximo el sartén, añadir el resto de la carne, una pizca de vinagre, raspamos el fondo del sartén rápido y retiramos. Calentamos de nuevo y ahora echamos la mitad de la cebolla. Un minuto, la retiramos y la otra mitad. Retiramos y echamos la mitad del tomate, 2 minutos y retiramos nuevamente.
5. Echamos la otra mitad, retiramos y listo. Hemos logrado un saborcito que ahora toca culminar y redondear uniéndolo todo.
6. Echamos ahora, otra vez, aceite y dejamos que caliente. Luego el ajo, la parte blanca de la cebolla china. Unos segundos y añadimos toda la carne con todo el jugo que ha soltado, toda la cebolla y el resto de vinagre. Luego echamos el tomate. Añadimos el ají amarillo y dejamos que todos los sabores se mezclen en un par de minutos. Añadimos la parte verde de la cebolla china y las hojas de cilantro. Si queremos que salga picantito, añadimos una rodaja de rocoto o unas rodajas de ají limo, chancamos un poquito algunos tomates para que boten más jugo y equilibren la acidez. A continuación, probamos cómo está de sal el juguito, y listo.
7. Si nos gusta a la antigua, mezclamos la mitad de las papas fritas a último momento o las acomodamos encima. Servimos el arroz aparte. El lomo saltado se presenta en platos hondos individuales, se sirve en una fuente o incluso en la misma sartén. Opcionalmente podemos montar cuatro huevos fritos para ir jugando con la carne, las papas y el juguito. Pero, claro, esto es solo apto para golosos.